El curso empezó la semana previa con formación on-line, en la cual los cursillistas tuvieron que rellenar un par de cuestionarios sobre sus conocimientos técnicos en progresión vertical y en técnicas de espeleosocorro. Además de las clases teóricas impartidas el martes 26 y jueves 28 donde se vieron las maniobras básicas de movimiento de camilla.
La fase práctica del curso comienza el sábado 30 en el parquin de cuevamur, tras un pequeño breafing y reparto de material nos encaminamos a la bonita boca de la cavidad situada en la pared del eco. Se instalan las distintas líneas de progresión y varias cabeceras repartidas por la cueva para los diversos talleres. Uno de los talleres trata sobre repartidores, otro sobre contrapesos, otro sobre tirolinas y otro sobre la camilla.
Los cursillistas se repartieron por los diversos talleres con buen hacer y ganas de aprender, la jornada se prolongó hasta entrada la noche en la cual recogimos el material y nos dirigimos al campo base que tenemos situado en Arredondo en el cual nos duchamos y disfrutamos de una distendida cena.
La jornada del sábado empieza sobre las 8 de la mañana, atiborrándonos de café y dulces para posterior mente cargar el material y poner rumbo al mortero de Astrana que será nuestro campo de actividades. Una vez en la preciosa cavidad se separa a los cursillistas por grupos para seguir realizando talleres mientras los monitores montan las instalaciones. Los talleres de hoy se forman en base a los contrapesos, contrapesos encadenados, tirolinas encadenadas y porteo de camilla.
La jornada discurre sin contratiempos, matizando lo aprendido el fin de semana hasta las 5 de la tarde donde recogemos bártulos y nos dirigimos al parquin para devolver el material común y bajar a Arredondo, donde en el río lavamos el material y realizamos el conteo para que no falte nada. Se devuelve el material en la escuela y cada uno pone rumbo a sus respectivos nidos.
El curso finaliza con una puesta en común el martes 3 en la plataforma zoom.